The Haunting of Hill House llegó sin hacer mucho ruido y se coloca como una de las grandes sorpresas del año.

A menos de un mes de su estreno, la nueva serie de Netflix llega con una refrescante fórmula para mantenernos en suspenso y de paso, dar una cátedra de storytelling.

Bastó con ver el teaser para llamar mi atención… el ambiente, los colores, la trama, los personajes. Todo se veía demasiado bien para ser verdad. Así que no esperé más y el fin de semana me aventé el maratón de The Haunting of Hill House y me llevé una grata sorpresa.

Lejos de esos títulos pedorros que publican, en los que dicen que es una serie que ha hecho vomitar y que muchos no la terminan de ver… lo que no podemos negar es que Hill House es una de las mejores propuestas actuales de terror y una grandiosa serie suspenso.

La serie está basada en la novela homónima (1959) de la escritora estadounidense Shirley Jackson la mamá de las historias sobre Casas Emrbujadas. La historia gira en torno a la familia Crain y los sucesos que marcaron la vida de todos los integrantes, durante el tiempo que habitaron la mansión de Hill House. No detallaré más en la historia para evitar spoilers y puedan disfrutarla como se debe.

Lo grandioso de la serie es el storytelling. Cada uno de los personajes son importantes y todos tienen su tiempo y su espacio. A cada integrante de la familia, se le dedica el tiempo suficiente para que nosotros los espectadores, podamos crear la empatía necesaria y entender el por que de sus acciones. Así como conocer a sus demonios internos, que los persiguieron desde la niñez hasta la vida adulta.

Más allá de la gastada técnica “jump scare” para asustarnos, en The Haunting of Hill House el suspenso es el rey. Durante casi toda la serie, la sensacion de que los personajes nunca están solos, no desaparece… siempre hay algo ahí, a veces a simple vista, otras tendremos que estar muy atentos a todo lo que sucede alrededor. Y es en este aspecto donde la serie da ese paso hacia el frente que la hace diferente, ya que está repleta de “detalles” que pueden pasar desapercibidos.

“El silencio empuja incansable las paredes de Hill House, y todos aquéllos que caminan por sus pasillos, caminan juntos”.

**Spoiler Alert**

La siguiente galería muestra todo lo que pasa fuera de foco… si quieres descubrirlo por tu propia cuenta evítala.

** Fin de Spoiler**

Algo que me encantó, es que dentro de la historia principal, existen pequeños relatos que son tan bien contados, que fácilmente se les podría dedicar un capítulo independiente. Es aquí cuando el estilo de la narrativa, nos recuerda a alguien… indudablemente esta serie apesta a Stephen King. Su influencia se nota por todos lados. El director Mike Flanagan toma mucho de la escuela de King y lo implementa en la serie con grandes resultados.

El género de terror no es ajeno Flanagan. Ya nos había dado señales de ir por buen camino con films como Gerald’s Game, Hush y Oculus. Sin ser una joyas, si están arriba del promedio. Pero es con Hill House con la que se consagra… vaya manera de contar una historia. Mención especial para los capítulos 5 y 6 que son ¡extraordinarios! Probablemente el mejor momento de toda la serie.

Con un buen ritmo, en el que cada capítulo mantiene el nivel, The Haunting of Hill House es sin duda, la mejore serie de terror que haya visto. No es que haya muchas opciones pero de entrada se lleva de calle a American Horror Story.

Finalmente creo que una de las claves del éxito de la serie es que nadie esperaba nada de ella. Llegó sin previo aviso y gracias a esto nadie se generó una falsa idea del producto final. Muchas veces el peor enemigo de una película, serie o videojuegos son las altas expectativas que se generan alrededor. No hay nada mejor que dejarse sorprender…

The Haunting of Hill House un pretexto perfecto para ese maratón de Halloween y un must para todos los amantes del género de terror.

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